El Hogar Alcarreño se llevó tres puntos de oro de su visita a El Palacio de Fontanar, después de doblegar a un combativo equipo local por 1-4 en un partido lleno de golazos y emoción. Los blanquiazules demostraron tener la puntería y la frialdad necesarias en los momentos clave, sellando una victoria trabajada y merecida.

Desde el arranque, el encuentro prometía estar reñido. El Fontanar, vestido de rojo, salió con ambición y plantó cara a los visitantes, llegando a tener ocasiones para adelantarse en el marcador. Pero el fútbol es un deporte de goles, y en la eficacia estuvo la diferencia. Contra el curso del juego, dos golazos de primera calidad —primero de Sáez y luego de Sergio— adelantaron al Hogar en el marcador antes del descanso. Dos estocadas que silenciaron temporalmente la grada local y enviaron a los blanquiazules al vestuario con un contundente 0-2 que no reflejaba la igualdad del terreno de juego.

La segunda parte arrancó con el Fontanar transformado. Con una intensidad arrolladora, los rojillos salieron mordiendo y lograron acortar distancias a los diez minutos de la reanudación. El partido se recalentaba y el empate parecía cuestión de tiempo. Con el marcador apretado y la moral por las nubes, los locales cometieron un único pero crucial error: descuidar su retaguardia en su afán por la igualada.

Fue el momento de genialidad que necesitaba el Hogar. Harry recogió un balón en medular y, en una carrera imparable cargada de velocidad y determinación, no soltó el esférico hasta plantarse frente al portero y batirlo con un preciso disparo raso. El 1-3, un mazazo para el Fontanar y un balón de oxígeno para los visitantes.

A partir de ahí, los locales bajaron los brazos y el ritmo. El Hogar, dueño del espacio y del tempo, controló el encuentro sin sobresaltos y puso la guinda final con un tanto de Juan Luis, quien, al acecho  y aprovechando un rechace dentro del área, no perdonó para decretar el 1-4. En los minutos finales, los blanquiazules estuvieron más cerca del 1-5 que los rojillos de recortar distancias, redondeando una exhibición de efectividad en la jornada.

Una victoria importante que sabe a gloria para el Hogar Alcarreño, que demostró carácter para sufrir y calidad para decidir. La próxima cita, en La Fuente de la Niña, frente al Optense.

¡Aúpa Hogar!